Quiero comenzar diciendo, que no he tenido nunca intención de presidir MurciaaEscena, no por desinterés hacia la asociación, ni por huir del trabajo que genera, todo lo contrario, sino porque, tal vez por deformación profesional, nunca me ha apetecido asumir ninguna “representación física”, más allá de la que mi propia actividad laboral y artística genera como actriz y directora de producción de Alquibla Teatro. De todos es sabido que la compañía a la que represento ha participado activamente en la fundación y funcionamiento de la Asociación a lo largo de estos cinco años.
Porque sois muchos los que me habéis animado y depositado vuestra confianza. Gracias.
Porque quiero liderar un proyecto de retorno al positivo diálogo entre todas las empresas miembros de la Asociación, que nos permita reflexionar juntos sobre problemáticas comunes, a través de la participación activa de todos los asociados. Es decir, una Asociación, que, con respeto y aplicación de sus Estatutos, pacte un funcionamiento asambleario, con la convocatoria de asambleas extraordinarias mensuales, de modo que todos seamos un elemento activo, que trabaje por conseguir durante esta legislatura, los objetivos marcados.
Porque tras cinco años de existencia, llegada ya a una mayoría de edad, con logros importantes en todos los campos -entre otros la obtención de la subvención nominativa- todavía queda mucho por hacer.
Porque me considero capaz de imprimir a la asociación el RITMO de trabajo preciso para llevar a cabo sus objetivos.
Así es y así deberá seguir siendo; porque si bien es cierto que fuimos las empresas quienes dimos vida a esta asociación, no lo es menos que ha sido MurciaaEscena quien nos ha permitido hacer realidad la ya mítica frase de “interlocutor único y válido frente a las administraciones públicas”; porque nos encontramos en un momento de extraordinaria consolidación, participando de forma activa en la política teatral de la región, en muchas ocasiones no sólo con voz sino también con voto, redundando todo ello indudablemente en cada una de nuestras empresas; porque podemos constatar que el crecimiento y consolidación de la asociación ha sido idéntico al del crecimiento y consolidación empresarial de muchos de sus asociados. Y todo ello demuestra que MurciaaEscena es además de un proyecto interesante, un proyecto interesado en nuestro beneficio directo.
A lo largo de esta legislatura y en este especialmente difícil año de elecciones, entiendo que MurciaaEscena debe abordar varios campos de acción, con ritmos a corto, medio y largo plazo (espero que el medio y el largo lo defiendan otros desde mi puesto): Por una parte debemos comenzar por renovar y esforzarnos por mantener de forma constante la imagen pública de la asociación, hasta conseguir que ésta sea también un “interlocutor válido y respetado” frente a la sociedad murciana. Pensemos en general para poder beneficiarnos en particular; MurciaaEscena necesita tanto de la proyección social que los medios de comunicación proporcionan, como nuestras propias empresas y este tiene que ser un mecanismo de beneficio mutuo. La presentación a los medios de comunicación de esta nueva Junta Directiva y de sus directrices de trabajo es una buena oportunidad para reavivar esa presencia social y mediática. Debemos mantener y afianzar el fluido diálogo con la Consejería de Cultura en base a todos los puntos reflejados en el INFORME 2007 aprobado en la pasada asamblea, incidiendo especialmente en los relacionados con aumento de presupuesto, creación de una unidad de teatro, adecuación de la publicación de las normativas a los calendarios propios del sector y la puesta en marcha de las concertaciones. Quiero que los asociados de MurciaaEscena, entre empresas de compañía, empresas productoras y empresas distribuidoras tengan condiciones económicas y jurídicas adecuadas para cumplir eficientemente los objetivos del teatro y la danza como servicio público y con un satisfactorio nivel de calidad en todas las actuaciones en las que el marco de regulación del sector haga posible una optimización de los recursos económicos. Debemos consolidar las estructuras de producción que nos permitan la creación de los mejores productos artísticos, retomando aquella máxima del año 2002 “hecho en Murcia y exportado al resto del mercado nacional e internacional”. Necesitamos retomar, aunque deberíamos decir iniciar, la negociación con el Ayuntamiento de Murcia, tanto desde la Concejalía de Cultura como directamente desde la Alcaldía, para abordar los clásicos puntos de creación de Circuito Profesional de Teatro Municipal, diferenciación y clarificación del teatro profesional frente al aficionado en dichos circuitos , ayudas a producción para el teatro profesional, así como solicitar información del nuevo TEATRO CIRCO. Las Jornadas de Teatro, que este año deben consolidar definitivamente nuestro proyecto de cara a la Administración Regional, a la sociedad en general y a la murciana en particular, y al resto de las entidades públicas o privadas del país, en la búsqueda continua de una identidad regional, constituyen otro punto sobre el que ya se está trabajando en firme. Mantengamos la defensa de la profesionalización, en continua lucha contra la competencia desleal, el fraude fiscal y laboral. Y hagámoslo desde la seriedad, el rigor y la transparencia de nuestras propias empresas. Porque somos un sector económico en alza que genera riqueza y contribuye al bienestar social con sus aportaciones a la Hacienda pública y a la Seguridad Social.Es preciso realizar la revisión de Estatutos y estudiar las propuestas de admisión de nuevos socios.
Debemos fomentar el desarrollo y ejecución de nuevos proyectos (Galas, presentación de catálogos, cursos, etc.) Creo que deberíamos abrir nuevos frentes de diálogo con las instituciones docentes (ESAD, UMU, UCAM, Conservatorio de Música, Conservatorio de Danza), organismos públicos como el Centro Párraga o privados como el Foro Artístico, asociaciones como la Críticos, Técnicos o de artistas en general, colectivos de teatro aficionado, entidades financieras (Fundación CajaMurcia y obra social de la CAM), así como lograr una mayor participación en FAETEDA y ADGAE, que puedan influir positivamente en el desarrollo de nuestro sector. Evitemos las políticas de improvisación, teniendo objetivos claros a corto, medio y largo plazo. Pongámonos a trabajar a partir de este mismo instante para hacer llegar nuestra voz y objetivos a las formaciones políticas de la región: PP, PSOE e IU y otras de menor representatividad. Y por último, considero necesario y, a partir de la obtención de la subvención nominativa posible, disponer de una sede propia que sirva de punto de encuentro entre los socios y de referencia física a nivel de la sociedad murciana. Y finalizo agradeciendo a todas las empresas que forman la asociación, que hoy MURCIAaESCENA llegue a su mayoría de edad, a todos los que le habéis entregado tanto tiempo y especialmente a las personas que durante tres momentos importantes han asumido la responsabilidad que hoy asumo, y que quiero compartir con ellas: Juan Pedro Campoy –presidente de la Asociación en su primer ejercicio-, Vicenta Hellín –en su larga responsabilidad entre el 2003 y 2006-, y a Alfredo Zamora y Juan Pedro Campoy –en su difícil etapa como gestora-. A todos gracias y a trabajar.
Martes, 20 de marzo de 2007